Me traje esta madeja de Lisboa. Lo digo sin reparos:
odio las madejas.
Cuando me pongo con ellas acabo liándome entre las hebra del principio y la del final.
Y paciencia, tengo poca...
Esta vez me ha ayudado "Currita, mi luchadora mejicana".
Sin su ayuda sería yo la convertida en un ovillo...
¡VICTORIA!
viva Curra y esa lana de colores tan molona. me teletransportaría a Lisboa ahora mismo. besos!
ResponderEliminarEsta preciosa la muñeca!!
ResponderEliminarYo también me peleo mucho con las madejas, se enredan a veces tan feo! Al menos tu tienes una gran ayuda!
Estoy sorteando un aro bordado, si te interesa pasa a esta página:
http://lluevediamantina.blogspot.mx/p/s-o-r-t-e-o.html
Ojalá y quieras participar, cuídate!